Cómo hacer un disfraz de mimo

Un disfraz de mimo es la mejor sorpresa que puedes otorgar en cualquier festejo. Por lo tanto, te indicaremos los pasos para que lo hagas de manera correcta.

Hay muchas personas que pueden avalar lo satisfactorio que resulta ver las caras de los invitados ante ello. Es un bello juego la temática de intentar comunicarte con la gente, mientras eres mudo y debes recurrir a los gestos.

Necesitarás lo siguiente:

1. Medias blancas.
2. Calcetines de rayas negras y blancas.
3. Pantalón negro (varón) o falda negra (mujer).
4. Camiseta blanca.
5. Tirantes negros.
6. Zapatillas negras de cordones.
7. Maquillaje blanco y negro para poner en el rostro.
8. Un sombrero de color negro.

Los pasos a seguir para el disfraz de mimo

1. En primer lugar, lo que se tiene que hacer es poner el maquillaje en la zona del rostro, ayudarse por una base de color blanca. Eso sí, en manera discrepante a lo que sucede con trajes de muertos vivientes o demás terroríficos, no debes explayarte por todo el rostro y cuello, tan solo la parte de la cara.
   A su vez, puedes ayudarte con una línea de remarque negra para resaltar la pintura.
   

   Son varios los detalles los cuales les puedes agregar a tu disfraz de mimo.

2. Luego, para continuar con los detalles y más detalles del disfraz de mimo, tienes que recaer en el rostro. Por ejemplo, unos buenos labios rojos y ojos negros, son muestra de lo más básico para poder añadir detalles de cicatrices. Esto último puedes evitarlo si no quieres hacer nada terrorífico.
   

   Aunque parezca mentira, están a quienes les gusta llevar al mimo hacia el lado terrorífico.

3. Por consiguiente, en lo que respecta al resto de los complementos que se pueden aportar, es lo más simple. Para ello, tienes que decantarte en un pantalón negro en el caso de ser varón, o bien una falda para las mujeres. Ahora bien, para este último caso, se aconsejan medias blancas y por encima unos calcetines rayados en negro.
   

   Son muchos los elementos que puedes llegar a decantar en un mimo.

4. Después, hay una gran inmensidad de trucos con los que puedes llegar a lidiar, como las cremas negras, las cuales puedes manipular fácilmente con un pincel para poder dibujar. Así, podrás delinear los párpados y hacer las típicas lágrimas bajo uno de los ojos.
5. Por último, tienes las boinas o sombreros extravagantes, en conjunto con alguna corbata y los tirantes. Es de lo más fácil poder hacer tu propia personificación de un mimo.

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