Los zombie son uno de los trajes más sencillos y divertidos de hacer. Ya sea para ti o para los más pequeños, siempre ganarás porque el gasto será mínimo y la diversión es asegurada. En este QueHowTo te enseñamos cómo hacer un disfraz de zombie e una forma sencilla. Sigue leyendo si quieres saber más.
Disfraz sobre zombie paso a paso
- Si quieres que el disfraz de zombie de tu hijo dé el pego, es importante que rescates de su armario aquellas prendas de ropa más viejas y que puedan romperse. Porque, para conseguir un efecto llamativo, es importante poder romper algunos pedazos de la ropa y, así, conseguir emular que, realmente, es un muerto viviente. Coge una prenda que ya no uses y hazle unos rotos pero ¡CUIDADO! No te pases, ya que puedes terminar destrozándola. Si quieres, también puedes hacer alguna rotura en los pantalones para crear un efecto similar y hacer que estos también se vean viejos.
- Lo más recomendable es que tanto los pantalones como la camiseta sean de color gris o marrón claro pues, de esta forma, se podrá ver bien la pintura roja que echaremos y, al mismo tiempo, parecerán más envejecidos.
- Para las manchas en la ropa lo mejor es coger una brocha y bañarla en la pintura. Ahora, simplemente deberás situarte a medio metro del disfraz y salpicar la pintura desde la lejanía para que, así, quede un efecto real de mancha y no se vea demasiado «pintado». Es recomendable que este proceso se lleve a cabo en el garaje, jardín, balcón o exterior de casa porque podrías manchar el suelo. Lo mejor es que gran parte de su ropa esté manchada de sangre.
- Para el calzado, lo mejor es optar por un calzado deportivo. Este debe ser de una tonalidad oscura.
- Puedes añadir accesorios que sean terrorificos. Uno de ellos puede ser sangre en la boca, obviamente falsa, que parezca que se acaba de comer a alguien. También una de las mejores opciones que hay es el cuchillo clavado en la cabeza que se coloca a modo de diadema y que consigue un efecto sorprendente.
Maquillaje
Para conseguir un maquillaje de zombie casero necesitarás los siguientes materiales:
- Pintura de cara de color gris
- Sangre líquida para maquillar
- Sombra de ojos de color negro
Paso a paso
- Limpiaremos el rostro con agua y jabón y secaremos bien.
- Ahora, pintaremos con la pintura de color gris todo el rostro dejando libre una redonda en los ojos.
- En cuanto tengamos toda la cara cubierta, deberemos coger un algodón y difuminar la pintura para que quede un resultado bueno.
- El siguiente paso consistirá en pintar la zona de los ojos que hemos dejado despejada con la sombra de ojos de color oscura. Crearemos unas ojeras pronunciadas y también los párpados.
- Para terminar, echaremos la sangre líquida en el extremo derecho de la frente dejando que caigan gotas que recorran todo el rostro.
Te dejamos un vídeo:
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