Cuidar un hurón tiene sus beneficios y desventajas, por lo que depende de cuan detallista uno mismo sea. Ahora bien, te indicaremos los pasos para que lo logres.

Estos animales destacan gratamente a causa de su energía, juego constante, diversión, amistad e inteligencia comprobable. Por todo ello, son mascotas que sirven para que uno no esté solo.

Si por algún motivo, tienes decidida la adquisición de uno, deberás recurrir a un veterinario para que te ofrezca tips de cuidado. Igualmente, si quieres obtener mejores consejos y recomendaciones, aquí te ofrecemos este artículo.

A tener en cuenta para cuidar un hurón

  1. En primer lugar, para poder lograr cuidar un hurón, tienes que seleccionarlo de manera sencilla. Son varios los colores y variedades de estilos, sin despegarse de la raza. Con antelación de darle lugar en tu vivienda, asegúrate que el veterinario le haya extirpado glándula perianal, esto es muy importante para que este no tenga olor.

    cuidar un hurón

    El hurón es una mascota de lo más limpia y sencilla de cuidar, si se le ponen atención a los detalles más mínimos.

  2. Luego, deberás comprarle una jaula al mismo, y mantenerla muy limpia, importante. A su vez, debe ser amplia para que permita que se movilice cómodamente. De tal manera, no tendrás que vigilarlo de que esté rompiendo cosas, a cada instante.
    Asimismo, podrás posibilitarle cosas para que arme su propia cama y sitio. En la misma, déjale bandejas para el agua y la comida, que sean profundas y así evitarás suciedad.
  3. Deberás mantenerlo en pleno divertimiento, con juguetes que le sean afines. O bien, con un simple tubo de PVC, que sean bastantes anchos. Todo ello, lo puedes acompañar con retazos en la parte superior de la jaula. Con pequeñas cosas, se hacen una discrepancia propia.
  4. Después, está la alimentación, como de las cosas más enfocadas y que le darán a tu hurón lo suficiente. Está el pellet, comida para gatos bebés o carnes. Solamente, podrás añadirle frutas y verduras. Eso sí, tienes que prohibirte ofrecerle lácteos, harina de pescado y demás golosinas, aunque sea lo único que haya.
  5. Por último, la limpieza de la mascota en sí, es de lo más fijo que debe estar. Habrá que bañarlo cada dos o tres semanas, en la manera de lo posible. Ya llegado el invierno, tan solo una vez al mes para evitar enfermedades.
    En materia de productos, hay champúes para estos o bien podrás sustituirlo por champú para bebé. Se recomienda que le rebajes las uñas para evitar rasguños y que el agua se encuentre en temperatura ambiente.