Si cultivar tu propia edulcorante natural sin calorías parece muy bueno para ser verdad, es hora de que conozcas la stevia. La estevia rebaudiana es una planta nativa de Paraguay y otras áreas tropicales de América que produce hojas con compuestos súper dulces que permanecen estables incluso después de que las hojas se hayan secado. Las hojas de stevia se han utilizado durante siglos en América del Sur para endulzar tés y otras bebidas. Los diabéticos y las personas que hacen dieta han recurrido a la stevia para disminuir su consumo de azúcar porque a diferencia de la miel, el agave, el jarabe de arce o la melaza, este edulcorante tiene cero calorías  y no es metabolizado por el cuerpo. La stevia es perfecta para endulzar bebidas, salsas para ensaladas de frutas, yogures y postres.  Continúa leyendo para saber cómo cultivar la stevia en casa.

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Consejos para cultivar la stevia

cultivar la stevia

Cultivar la stevia es muy fácil y puedes hacerlo en macetas bien drenadas a partir de semillas en interiores a finales del invierno (cuando ya no haya riesgo de heladas). Prepara los recipientes donde vas a sembrar la stevia. Llénalos con turba humedecida y esparce las semillas por la superficie sin taparlas para que puedan germinar. Ten paciencia pues para germinar pueden llegar a demorar entre 7 y 30 días.

La stevia crece mejor en condiciones cálidas similares a las preferidas por la albahaca. Lleva las macetas en un lugar con luz indirecta y mantenlas con humedad. Riega cuidadosamente para que las semillas no se pierdan y se puedan germinar bien.

A los 90 días podrás trasplantarlas a una maceta más grande y enriquecer el nuevo sustrato de turba con humus. Esta hierba crece mucho mejor en un clima fresco de verano, aunque puede llegar a enfrentarse a las bajas temperaturas sin sufrir graves daños. Cuando la planta florece, a principios o mediados del otoño, muestra flores blancas.

Cosecha las hojas de stevia una vez que hayan aparecido los capullos de las flores pero antes de que se abran. Lo ideal es hacerlo en la mañana cuando la planta está en su mayor contenido de azúcar. Si la mayoría de las flores se han abierto, dejarán un regusto amargo en toda la planta.

Nota: asegúrate de cultivar la stevia un lugar accesible ya que necesitarás juntar los tallos con frecuencia.