Las flores secas son un perfecto complemento decorativo para nuestro hogar, dándole un toque vintage a cualquier espacio. Además se trata de una opción muy económica. Pues basta con secar cualquier flor que te hayan regalado o que hayas comprado previamente. Esto para tener una decoración que te durará años. Sin embargo cuando llega el momento de sacudir un poco el polvo de casa, muchas personas se preguntan qué trucos usar para limpiar las flores secas. En este QueHowTo te enseñaremos cómo limpiar flores secas. Sigue leyendo para más.
Cómo limpiar flores secas paso a paso
- Un buen truco para limpiar flores secas que no requiere de mucho trabajo es el de usar un secador a temperatura media o fría para eliminar el polvo acumulado en las flores. La fuerza del aire te permitirá deshacerte del polvo sin dañar o maltratar la flor. Sin embargo es importante que la temperatura no sea muy caliente o las flores secas podrían deteriorarse.
- En el caso de que tus flores secas tengan manchas o una capa de polvo un poco más pegajosa. Una buena idea es valerte de un limpiador para teclados de ordenadores. Estos productos cuentan con aire comprimido que sale de forma potente pero delicada. Esto te ayudará a deshacerte del polvo o las pequeñas manchas que han quedado en tus flores secas.
- Un truco efectivo para limpiar flores secas cuando el secador no ha funcionado de la forma que esperamos, es usar la sal gorda. Solo necesitarás una bolsa de plástico resistente, coloca dentro un puñado o dos de sal gorda e introduce las flores secas de cabeza, sujetándolas por el tallo.
- Una vez que todas las flores estén dentro, agita con delicadeza la bolsa de manera que la sal se lleve todas las partículas de suciedad. Al sacar las flores secas de la bolsa verás como lucen mucho más limpias Este truco es perfecto especialmente en arreglos muy tupidos que suelen acumular el polvo entre sus pétalos u hojas.
- En casos en los que tus flores secas están muy manchadas y llenas de polvo, hay un truco más que te ayudará a dejarlas como nuevas. Hierve un poco de agua, la suficiente para luego sumergir tus flotes, con un par de cucharadas de bicarbonato de sodio. Espera que el mismo se diluya antes de sacar el agua del fuego. Una vez que la mezcla se haya enfriado puedes sumergir tus flores secas por 10 minutos. Los resultados son impresionantes, haciendo que tus flores luzcan como nuevas.
Te dejamos un vídeo sobre el tema: